Aunque sean una prenda simple y cotidiana, los calcetines pueden convertirse en un verdadero desafío para nosotras las tejedoras. ¡Es que cada par tiene su ciencia! Y queremos que todas puedan desbloquear ese logro antes de que llegue el invierno.

Lo primero es tener claro qué buscamos. Y aquí lo fundamental sería, además de satisfacernos estéticamente, que la prenda ofrezca comodidad. Eso implica que su textura sea suave y resistente, permita a la piel respirar, tenga buen calce y además logre la elasticidad necesaria para mantenerse en su lugar, sin presionar en exceso ni provocar rozaduras. La selección del material es entonces el primer paso importante. Nuestra Merino Sock Fingering SW aquí se roba las miradas, porque abriga sin ahogar la piel, es extremadamente suave, cuenta con la cuota justa de nylon para aportar firmeza y permite tejer casi cualquier patrón de calcetines con solo una madeja. ¡No por nada es nuestra base más vendida de todos los tiempos!

Claro que ni el mejor material es suficiente si no damos con la tensión y calce que nuestros pies necesitan. Aquí el patrón es fundamental, seamos tejedoras avanzadas o principiantes. Y nuestra recomendación es MUY especial: “Rocails”, lo último de Pope Vergara. Es un diseño precioso que la Pope publicó en el recién llegado “52 Weeks of socks. Vol.2”. El Libro de Laine Magazine ya está en Chile y nuestra diseñadora favorita se luce con un patrón femenino, de construcción perfecta y con esos toques de brillo estelar que la caracterizan. Son unos calcetines maravillosos… ¡y fueron creados con nuestras lanitas! Estamos demasiado orgullosas de que los hilados de Madejasur estén dando la vuelta al mundo. Y como muchas quieren lanzarse a tejerlos ahora ya, tenemos listas las lanas en las mismas tonalidades, y kits con todo lo necesario para lograr unos Rocails soñados.

Que quede claro, los calcetines siempre son demandantes, hasta para lograr dos iguales. Pero aquí les compartimos algunos secretos para que se atrevan con ellos, disfruten su proyecto y logren satisfacción inmediata. Como las lanas socks habitualmente son fingering, tus palillos para calcetines básicamente tendrán siempre el mismo grosor (según tu tensión, podrían variar entre los 2 y 3 mm). Aún así, el tipo de herramienta sí varía de acuerdo a la técnica que elijas:

• Trabajar con seis palillos de doble punta a la vez, para dar forma a la prenda sin estirar demasiado los puntos. Para eso, la labor se reparte en cuatro agujas, mientras que se usa la quinta para ir tejiendo cada sección. Funciona bien, pero para algunas tejedoras resulta tedioso y necesitas un set de doble punta especial para calcetines. Por lo mismo, en Madejasur disponemos de LA alternativa: los Sharp Flyers Tips de Hiya Hiya, que combina lo mejor de las agujas intercambiables con las de doble punta funciona perfecto para cualquier proyecto pequeño, en conjunto con los cables Flyers.

• Utilizar tus palillos circulares habituales -fijos o intercambiables, pero con cable de 100 centímetros-y aplicar magic loop. Este es un sistema tan amado como odiado, que deja puntos en espera en el cable para lograr pequeñas circunferencias. Requiere sólo el apoyo de un marcador y alternar el trabajo de cada palillo. Puede que tome un poco de tiempo acostumbrarse, pero no obliga a sumar nuevas herramientas y a la larga es súper simple y accesible para todas. Te recomendamos los Hiya Hiya Sharp, muy afilados y en la numeración que prefieras.

• Tejer en circular con agujas cortas, de cables también cortos. Nos referimos a palillos de alrededor de cinco centímetros y cables que parten en los 13 centímetros, que cubren la circunferencia completa de cada calcetín. Es bastante práctico, aunque para algunas tejedoras implica estirar mucho los puntos y las agujas tan cortas pueden resultar incómodas de manejar. Como es cosa de gustos, en la tienta tenemos las de Hiya Hiya, que se llevan la medalla a las más cortitas del mercado.

En la medida que vayas probando, además, podrás definir si prefieres iniciar tu proyecto desde la pierna, la puntera o el talón. Sólo te proponemos dos últimas sugerencias: no te compliques demasiado con los puntos elaborados, hasta que domines la técnica que mejor se adapte a ti. Y cuida más que nunca las terminaciones. No quieres nudos ni pequeñas imperfecciones que molesten al caminar. No es necesario que mencionemos la muestra de tensión, ¿verdad? Porque en este caso es fundamental para garantizar la presión correcta y el calce deseado. Nuestra última advertencia es que una vez que logres lo que quieres… ¡los calcetines son un vicio MUY difícil de dejar!