En estos días estamos de estreno con una nueva colección de Kid Mohair Silk, en una propuesta de colores realmente soberbia. Vienen algunos tonos ya clásicos de Madejasur y muchos (muchos!) totalmente nuevos. La idea es que puedan tejer proyectos preciosos, actuales y con personalidad para la temporada de frío. Entonces decidimos actualizar nuestro multifacético Mohair, una fibra para tejerla solita o como segunda hebra. Ojo sí, que al agregarlo a otra lana, aumentamos   automáticamente el grosor del hilado, por delgado que parezca a la vista.

Nuestra base Kid Mohair Silk tiene una luminosidad única, característica de esta fibra natural, pero además potenciada por la seda. Cada madeja de 50 gramos y 420 metros es 72% Kid Mohair y 28% seda. Eso lo convierte en un hilado ultra suave y muy exclusivo, que ofrece acabado ligero, pero cálido a la vez. Si bien es súper volátil, abriga un montón gracias a sus características térmicas. Además, luce muchísimo en cualquier diseño, porque sí o sí es sinónimo de lujo en una prenda. Y para las que no sabían, el Mohair NO es lana, sino pelo. La fibra se obtiene del pelo de la cabra de Angora (nada que ver con el conejo Angora que le da su nombre a otro hilado).

Si aún no pasa por tus palillos esta delicia, te contamos algunos secretos para que vivas la mejor de las experiencias. Con algo así de lindo, obviamente la idea es disfrutar del proceso y tener resultados a la altura. Lo primero entonces, es ser súper realista con el grosor del palillo elegido. Porque una de las maravillas del Mohair, es que nos regala texturas vaporosas, que se logran dándole libertad a los “pelitos” que sobresalen de la hebra. Por lo mismo, usa palillos más gruesos que los que teóricamente corresponderían al grosor de la lana. Eso sí, los de puntas bien afiladas, seguro te proporcionan buenos resultados.

Otro punto importante: si vas a tejer sólo con Mohair, opta por un patrón diseñado para esta fibra. Los calados lucen muy bien, pero probablemente no es la mejor opción para puntos demasiado tupidos y complejos. Si notas que la propuesta puede ser más bien complicada, prueba tejiendo primero en un hilado que conozcas, para comprobar cómo te va. Y por supuesto… ¡no te olvides de la muestra! Siempre es fundamental en un proyecto, pero con el Mohair y sus pelusitas, nadie quiere desarmar lo avanzado y enredarse en el camino. Adicionalmente, evalúa no tensar demasiado la hebra, para mantener el cuerpo liviano de la fibra.

En relación a los cuidados, te sugerimos comprar un peine rotativo para cardar Mohair, que mantendrá vaporoso tu proyecto a pesar de los lavados. Por supuesto, la recomendación también considera lavar a mano brevemente, en agua fría, con detergente suave y sin aplicar torsión a la prenda. Si la secas extendida y a la sombra, te garantizamos que tu clóset tendrá lujo por mucho tiempo. Y con todo esto claro, te invitamos a deleitarte con los colores que están a punto de salir del horno. Puras maravillas para la vista y el tacto.